¿Qué es eso del amor propio?

El amor propio se puede definir como la percepción positiva que tenemos sobre nosotros mismos:  aceptación, respeto, valor, pensamientos positivos y consideraciones, y es una cualidad que puede ser apreciado por los que nos rodean.

Forma parte de nuestro autoestima, de cómo nos vemos y valoramos a nosotros mismos. Y por ello, es fundamental para relacionarnos con los demás y con el mundo que nos rodea.

Desde pequeños nos enseñan que tenemos que querer a los demás y ser buenos con ellos, pero a menudo se les olvida enseñarnos de que lo primero de todo es quererse a uno mismo y ser bueno consigo mismo.

Si no eres bueno contigo y tú mismo te menosprecias o infravaloras, eres el primero que te estás tratando mal. Y cuando eso pasa, no puedes pedir a los demás que te traten bien.

El amor propio depende de nuestra voluntad para querernos. Y refleja la relación que tenemos con nosotros mismo e informa sobre los sentimientos y pensamientos hacia nuestro físico, personalidad, carácter, actitudes y comportamientos.

Cuando no valoramos lo que hacemos nos sentimos vacíos, y no contribuimos a nuestro crecimiento personal, sean cuales sean las metas que nos pongamos.

El amor propio se compone grandes descubrimientos sobre uno mismo y sobre el mundo que nos rodea.

¿Se puede mejorar el autoestima?

Cultivar el amor propio es fundamental, pues puede hacer que cambiemos todos nuestros objetivos a corto, medio y largo plazo si sentimos que lo que estamos haciendo en nuestra vida, aunque lo hagamos bien, no habla bien acerca de quiénes somos o no acaba de encajar con lo que queremos.

No es fácil aprender a quererse a uno mismo, y es frecuente que empecemos a hacerlo después de que algo nos haga un profundo daño que nos hace cambiar la forma de vivir.

La base de nuestra estabilidad emocional reside en un amor propio sano y fuerte.

Cuando tenemos un amor propio fuerte y estable, dejamos de buscar fuera y encontramos dentro todas esas cosas que creemos que nos hacen falta.

No amarse a uno mismo implica asumir una cantidad enorme de riesgos, ya que hará que no vivamos una vida plena y estemos siempre con una sensación incómoda allí donde vayamos. Sobre todo porque nos hará compararnos constantemente con los demás y siempre saldremos perdiendo.

El ego es algo de lo que hablaremos en el siguiente blog, y a pesar de que mucha gente confunde estos términos, tienen significados muy diferentes. El amor propio nos hace crecer y el ego nos empequeñece.

A menudo, cuando el amor propio es muy pequeño, solemos dejarnos llevar por los demás y, a la larga, a estar en situaciones que no nos gustan y que nos llevan a conflictos con nosotros mismos. Esto puede dar lugar a trastornos de ansiedad, del sueño o del ánimo.

×

Hello!

Click one of our contacts below to chat on WhatsApp

× ¿Cómo puedo ayudarte?